Toda historia tiene un comienzo...

sábado, 11 de junio de 2011 comentarios: 4
Todo empezó hace bastantes años. Mis padres me regalaron mi primera guitarra, una española, cuando tenía aproximadamente 9 años(1986). Me gustó mucho, pero no me apuntaron a clases y me dieron un libro. Ser autodidacta es muy complicado. Pero serlo con 9años, es casi imposible. 

Así que la guitarra, metida en su funda, estuvo durmiendo durante años sin que nadie le prestara atención.

23 años después, en 2009, coincidí en el curro con un compañero al que tengo mucho que agradecer por haberme introducido en el mundo guitarril. Gracias José Manuel (a partir de ahora, JMG)

Un dia, JMG me comentó que quería apuntarse a clases de guitarra española en un centro cultural que me pillaba bastante cerca. Entonces fue cuando me acordé de mi guitarra. ¿y si me apuntara con él a clases? Me animé y decidí probar a ver qué tal se me daba. 

Así que recuperé mi guitarra, que estaba nueva a pesar de tener 23 años. Me apunté y con ilusión, acudí el primer día de clase. 

He de decir que empezaba de cero patatero, no había tocado la guitarra en mi vida. JMG ya sabía tocar bastantes cosillas, con lo que el nivel entre los dos era bastante diferente. Cuando entré en la clase, me encontré con un grupo bastante diferente de gente. Había desde el cincuentón con su acústica, hasta un niño que parece que le obligaban a ir a clase. Ah no, que era una niña. Es cierto que la confundí el primer día, pero coño, pero tenía media melena, gafas y... bigote! . En fin... El profe, un chaval joven de raza gitana, se le veía majete. Y la verdad es que en el tema de flamenco, te quedabas flipao viéndole tocar. 



Pues nada, al ser gente de diferente nivel, dedicaba  un rato a cada uno. Cuando me tocó el turno a mi, le dije que no tenía ni idea, que era la primera vez que tocaba. Me enseñó a coger la guitarra y luego me indicó como primer ejercicio, la escala cromática.Parecía fácil. Pero cuando lo intenté por primera vez, los dedos no me respondían. Coño, ¿que cojones hace el dedo anular? No me responde... y no digo nada del meñique. Que mal. Empecé a agobiarme un poco. Seguí intentándolo, pero no había manera de que mi meñique llegara al traste cuatro de la sexta ni de coña. Me dolia la mano izquierda mogollón. Además veía a todos los demás tocando y yo sin poder hacer nada. En ese momento pensé: "Esto no es para mi, lo dejo, a tomar por culo". 

Si, me rendí muy pronto. Afortunadamente, no lo hice de verdad. En casa, me esforcé y por fin conseguí llegar con todos los dedos, eso si, muy torpemente. Pero eso me dio alas y ganas de seguir adelante.
 
Clase tras clase iba notando que progresaba. Era el último de la clase, pero ya no me importaba, veía progreso que es lo que me motivaba.

Le comenté a mi colega Paco, que sabía que estaba aprendiendo eléctrica con un particular, que estaba en un centro cultural aprendiendo española, que no era caro y bueno... no estaba mal para lo que costaba. Se animó y se apuntó conmigo.

Al poco tiempo, también se apuntó mi cuñada Diana, pero no le moló nada el profe y duró poco.
 

comentarios: 4

gogua :

Ánimo con la iniciativa, ahora poco a poco a ir colgando esos videos.....

Quique :

Enga a darle al blog y a la guitar... Vaya tela por cierto has ido apuntando a todo el mundo XDDD

jmsevilla :

Eres un "culo inquieto" Tony. Me parece fenómeno.
Ya estoy esperando la segunda entrega!!

Edu García :

Vas a tener que escribir rápido hasta llegar al nivel, y las guitarras, que tienes ahora. Un abrazo compañero.

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